
Galería
Siboney
Santander, España
El proyecto se estructura con los trabajos de 4 artistas.
Ramiro Fernández Saus (Sabadell, 1961)
Un artista que trabaja con la londinense galería Long & Ryle, y tiene un gran éxito desde el punto de vista de mercado, y sus precios se adaptan al mercado británico.
Presentaremos junto a la pintura alguna acuarela, y pequeñas esculturas de algunos de los personajes de sus pinturas que pinta al óleo el artista.
Nuestro deseo es transmitir todo este singular mundo escenas serenas protagonizadas por perros, árboles, tigres, pájaros o barcos de vapor que, sin describir ningún hecho trascendental, nos cautivan.
Como si se tratase de un cuaderno de explorador, nos ofrece una narración de trazos cortos y colores moderados, donde la perspectiva y las proporciones se relajan para sublimarse en una aventura que ha de ser desvelada.
Teresa Moro (Madrid 1970). Lleva años pintando objetos de uso común, la conexión afectiva con ellos o el poder de evocación que la relación con sus dueños mayoritariamente los protagonistas del arte del SXX-, les aporta. Últimamente, explora y revisa el movimiento moderno en busca de un antídoto ante la imparable estandarización que la sociedad de consumo impone en nuestros hábitats.
Teresa Moro nos ofrece una colección intimista de delicados gouaches y acrílicos con los que delinea muebles y objetos personales de Matisse, Calder, Hopper, Magritte, los estudios o los pequeños muebles auxiliares de Bourgeois, O’Keeffe, D. Judd o D. Hockney. Estamos asistiendo a una transformación, a una veneración del estudio de los grandes artistas como reliquias, como santuarios. Son imágenes que evocan un contacto sensual, multimodal, con los objetos que podrían desencadenar, restaurar, los recuerdos de otra persona con la que desearíamos tener afinidades. Hay una forma de pensar en imágenes, o de sentir con una materia, con unos objetos determinados, que no se puede transcribir en palabras.”
Una artista formada en la Complutense madrileña, que continúa su formación en Londres, Painting BCA, Chelsea College of Art and Design, the London Institute, y que ha logrado tener obras en las más importantes colecciones nacionales, como el CGAC, (Centro Galego de Arte Contemporáneo, Santiago de Compostela). Fundación Endesa. Museo de Teruel. Ministerio de Cultura, MEIAC, Museo Extremeño de Arte Contemporáneo. Banco de Sabadell. Colección Unicaja, Málaga. Colección Coca-Cola España, Madrid. Colección Prosegur. Colección CAB Caja Burgos, entre los españoles.
Y en el MOMA, Museum of Modern Art (Colección de Dibujo Judith Rothschild Fundation), Nueva York, E.E.U.U. o la también neoyorkina Hoggard Wagner Art Collection, entre los internacionales.
Dis Berlin (Ciria, Soria. 1959) es uno de los artistas más destacados de su generación, la de la figuración realizada en Madrid a partir de los años 80. Su rico y personal mundo creativo ha quedado atrapado en la retina de los espectadores porque su obra ha estado presente en muchas de las películas de Pedro Almodóvar, desde Átame! (1990) hasta La habitación de al lado (2024), formando parte ya del imaginario colectivo.
Todo en su obra está trazado meticulosamente tanto desde un punto de vista estético como formal y temático. Desde el título con el que concibe cada obra -que juega con la poesía- hasta el relato que desprende el conjunto es fruto de una labor estudiada al detalle, sin dejar nada al azar ni a la improvisación.
Dis Berlin, un alquimista del color, que crea historias oníricas abiertas a la interpretación del espectador, que ha demostrado gran versatilidad de propuestas estéticas con las más variadas técnicas, y que ha sabido compaginar también con la labor de galerista, editor y comisario.
Charris (Cartagena, 1962). La obra de Ángel Mateo Charris siempre se ha vinculado a la idea del viaje. Su mirada es la de un explorador que avanza por la historia y el presente con el ánimo dispuesto a la sorpresa, uniendo puntos de vista a veces imposibles, combinando imágenes y conceptos hasta lograr composiciones extrañas pero a la vez familiares
A través de una figuración de línea clara y colores vivos, el pintor da forma a imágenes concebidas como un collage de fuentes y contenidos a veces contrapuestos, donde juega con las conexiones entre realidad y fantasía a través del lenguaje pictórico.
La narratividad es un elemento clave en sus composiciones. Aparece a veces sutilmente y otras de un modo mucho más explícito. Sus lienzos poseen algo cinematográfico, como de instante detenido. Nos sitúan en mitad de una historia que no conocemos y debemos imaginar. Esta cualidad la comparte con el realista americano Edward Hopper, un importante referente para nuestro pintor.